Los niños y niñas, desde que nacen hasta aproximadamente los seis o siete años son poseedores de una conciencia mental pura, siendo capaces de relacionarse directamente a través de sus sentidos, percepciones y emociones sin necesidad de clasificar o juzgar lo que los rodea.
Es por ello que podemos hablar de características natas en los niños y las niñas, estas características se identifican porque surgen de la inocencia e ingenuidad con la que los niños nacen. Algunas de estas características son: curiosidad, aprendizaje a través de los sentidos, desarrollo físico, exploración, observación, imitación, identificación, desarrollo de emociones y memorias a través del ambiente que los rodea, espontaneidad, adaptabilidad, entre otras. El desarrollo de estas características natas servirá para potenciar diferentes habilidades, ya sean blandas o duras, que serán fundamentales para el desarrollo de competencias cognitivas, el bienestar emocional, la competencia social y una buena salud física y mental.
Estas características natas son necesarias para conectar con la vida, con nosotros mismos y con los demás. Nos ayudan a forjar nuestro carácter, a darnos una identidad y a desenvolvernos en diferentes ámbitos, al mismo tiempo nos sirven para fomentar y desarrollar la empatía y responsabilidad. A los adultos nos corresponde ser facilitadores ante las dificultades que pueden enfrentar los niños en el desarrollo de las características para la obtención de habilidades, está en nosotros guiar sus pasos, pero dejando paso a la improvisación
A continuación, mencionaremos algunas estrategias que los adultos, ya sean maestros o padres de familia, pueden desarrollar con sus niños para potencializar estas características natas de los niños.
- Actividades exploratorias: al iniciar a los niños en diferentes actividades se les brinda la posibilidad de que ellos escojan cuáles se adaptan a sus necesidades e intereses, potenciando la curiosidad los niños pueden llegar a desarrollar habilidades como creatividad e innovación.
- Descubrimiento guiado: tiene como objetivo que los niños establezcan conexiones y construyan conceptos a través de la interacción con objetos y personas, se busca que el niño experimente, se plantee preguntas y obtenga respuestas, desarrollando el pensamiento crítico.
- Solución de problemas: incentivar a los niños a resolver diferentes problemas basados en su entorno o en ellos mismos, los enseña a planificar, predecir y formular resultados. De esta manera los niños están desarrollando habilidades como la capacidad analítica a su vez que potencializan la observación e intuición.
- Discusión: incentivar y enseñar a los niños a una correcta discusión es muy importante para su desarrollo futuro. Durante la discusión los niños desarrollan habilidades sociales ya que tienen que tener una interacción recíproca ya sea con otros niños o con adultos, desarrollando la capacidad de reflexión y comunicación y habla asertiva.
- Aprendizaje cooperativo: involucrar a los niños para desarrollar juntos un proyecto o alcanzar un fin desde muy corta edad les ayuda a desarrollar habilidades socioemocionales, ya que aprenden a desarrollar habilidades como trabajo en equipo, manejo de frustración, productividad y liderazgo.
- Demostraciones guiadas por los niños: hacer que los niños realicen demostraciones de algún proyecto, algo que les gusta o alguien a quien admiren, les ayuda a desarrollar la confianza en ellos mismos y a ser autocríticos.
- Instrucciones directas: es importante dejar que los niños desarrollen diferentes aspectos libremente, pero también el enseñarlos a seguir instrucciones directas ayuda a desarrollar habilidades como autorregulación, concentración y responsabilidad.
Por último, es importante mencionar que el juego es un excelente medio en el cual podemos involucrar todas las estrategias anteriores, ya que al tener un panorama tan amplio que va desde un juego libre donde los niños desarrollan la creatividad e imaginación a su máximo hasta un juego guiado donde los niños tiene que aprender y seguir las reglas, o bien, puede ir desde un juego individual donde el niño desarrolla y experimenta el autoconocimiento de sus emociones hasta un juego grupal donde los niños aprenden a socializar, intercambiar argumentos y organizarse. Para potenciar las características natas a través del juego, LEGO® Education cuenta con diferentes materiales, los cuales están enfocados en el desarrollo de habilidades que les dará las herramientas para enfrentarse a un mundo tan competente en un futuro.